La jovencísima marca inglesa Pointer, fundada en 2004, tiene unos principios muy del nuevo milenio, y eso se refleja en sus diseños. Que sus miembros controlen varios ámbitos cotidianos, como dicen en su página oficial se basan en el arte, la música, skateboarding o en desayunos. Es decir, unas ideas que les llevan a un estilo de zapatos de hombre casual, ponible a diario, cómodo, con un toque distintivo que se aleja de las zapatillas, tenis y botines deportivos convencionales.
Su suela de goma blanca delata esa intención de comodidad para el día a día. Son el calzado que llevarías al trabajo, con el que paseas una tarde o con los que asistes a una cena informal con colegas.
Sin embargo, es en el resto del zapato donde recae el diseño principal. Colores naturales y nada extravagantes, de fácil combinación, anillas metálicas para unos cordones de tamaño estándar que siguen el mismo patrón de colores del resto del diseño.
Las zapatillas de hombre de la marca Pointer han entrado fuerte en el mercado del calzado. Son fáciles de conseguir tanto por internet como en tiendas físicas.
Su colección 2011-2012 ya ha sido un éxito. Esta marca va en serio y en buena línea.
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